Este puente de diciembre ya ha empezado la temporada de esquí en Cerler.
Con mucha más nieve que la temporada pasada, con muy buena calidad y, además, con muy buen tiempo.
Cerler estaba de lujo.
Además, hemos podido sacar mucha información y entrevistas para nuestro podcast Hablamos de esquí. Continuamos haciendo un programa semanal, a pesar de la exigencia que conlleva, pero de momento aguantamos.
Aquí dejo el quinto capítulo, una versión exprés que hicimos sobre la primera parte del puente:
Podéis escuchar todos los capítulos en nuestra página web: hablamosdeesqui.com
El pasado fin de semana puse fin a mi temporada de esquí en Cerler. Una temporada extraña, pero que allí me ha hecho disfrutar del esquí como hacía tiempo que no lo hacía. He estado entrenando con el Club de Esquí Valle de Benasque, reciclándome, aprendiendo cosas nuevas, conociendo nuevos entrenadores y compañeros… Una grandísima experiencia.
El sábado pasado, úlitmo día de club, fue la Prueba Social.
Un slalom gigante, montado en la parte final de la pista Codornices…
Ambiente de fiesta en la salida con todos los participantes, de todas las categorías.
Con toda la colaboración por parte de Cerler, el trazado estaba increíble. Cerrado, con cronómetro, portillón y personal como si fuera la carrera del año…
Yo bajé el último antes de los entrenadores y la pista ya tenía unos pocos escalones… pero aun así lo disfruté mucho.
En cuanto al resultado, aunque era lo menos importante, fenomenal. Décimo de todo el club, incluyendo los chavales de 16 y 18 años que van como tiros… y todos los entrenadores.
En mi categoría, adultos, segundo. Teniendo en cuenta que el primero fue tercero de la general, ni tan mal… 😉
Balance excelente del día y de la temporada.
Gracias a todos los que nos habéis permitido disfrutar de este año. Tanto a Econieve por las facilidades en compaginar, al Club de Esquí Valle de Benasque y todos sus entrenadores y, por supuesto, a la estación de Cerler por su grandísimo trabajo este año.
Ojalá podamos volver a vivir esta experiencia pronto…
El Cogulla es una de las pistas más emblemáticas de Cerler, al menos para mí, con todo mi respeto por El Gallinero.
Es una pista larga, con distintas pendientes, ancha… perfecta para entrenar. Y sí, el telesilla es muy lento, pero eso hace que cuando bajas, haya la cantidad de gente justa en la pista.
En esta pista he vivido un montón de cosas… he hecho muchos cursos y he aprendido un montón…
Es LA pista.
El anterior fin de semana, Carlos me grabó bajándola. ¿Te vienes?
Además, gracias a las nevadas de los últimos días, hemos podido esquiar en todo tipo de nieves. El sábado 27 de febrero, por ejemplo, una nieve polvo de una calidad que ya quisieran en Canadá…
Aunque esta temporada parece que se está torciendo un poco, al menos el principio, y mientras esperamos que nieve en Madrid y pueda empezar los cursos en la sierra con Econieve, ya llevo quince días de entrenamiento con el Club de Esquí Valle de Benasque.
En estos días he podido estar con Sito, que es nuestro entrenador habitual, pero también con Héctor y con Félix. Entre los tres, y con mis preguntas, vamos aclarando el panorama y cambiando las cosas que hago mal, afianzando las que hago bien… y despejando las dudas sobre la técnica del esquí.
La verdad es que lo estoy pasando muy bien, disfrutando de la nieve, del esquí, de las bajadas, de las sensaciones…
Dejo aquí unos vídeos que no son ejemplos de nada. En ellos se ven muchas cosas que todavía tengo que mejorar, son vídeos que me sirven a mí para verme… Pero es lo que tengo, así que como esta es mi página personal, pues los pongo.
Ayer sábado, me grabé a cámara lenta… ¡y ahí sí que se ve todo! Todos los movimientos, todos los gestos… ¡y sus consecuencias! Tenía que ser un viraje no muy rápido para que me pudieran seguir… (¿excusa? No…)
Hoy he pasado el último día del 2015 esquiando en Cerler… Además de compartir el día con buenos amigos y compañeros de nieve, lo he pasado bien con BB-8, uno de los grandes hallazgos del Epidodio 7 de la saga Star Wars.
La historia comienza en este invierno atípico… Hace calor, casi no ha nevado… Y encima aparece hoy BB-8 y se pone a trastear con un cañón… Seguramente sin mala intención, quizá porque la forma le resultaba atractiva…
Pero claro, la cosa está tan malita en todas las estaciones, que tonterías las justas con los cañones y con el sistema de innivación artificial… Así que el espisodio dos de mi aventura en Cerler ha sido “la estación contraataca”:
Vamos, que ha salido escaldado y pienso que ya ha aprendido la lección.
Hoy celebraremos la llegada del nuevo año y mañana a esquiar un poco más… Confiando en que el 2016 traiga bastante nieve a toda España y podamos disfrutarla.
Por lo demás, feliz año a todos y mucha confianza en que todo será mejor que este año que ya acaba…
Actualizando este post, al poco de empezar el año 2016, BB-8 ya regularizó su situación y comenzó a trabajar en el equipo de nieve de Cerler… Trabajando en las entrañas de la tierra para que los cañones funcionaran a pleno rendimiento.
No voy a poder dar la respuesta en este post o, al menos, no la podré dar yo… porque no lo sé.
Es una pregunta auténtica, una duda real que me asaltó el pasado fin de semana en Cerler.
Serían sobre las nueve y media de la mañana, cuando estaba subiendo en el telesilla del Cogulla y vi un globo aerostático.
– ¡Ohhh! ¡Un globo! – que es lo primero que dices cuando ves uno…
Volaba bajo, relativamente, a la derecha del telesilla… y a una buena distancia sobre el valle.
Tras hacer una bajada esquiando, volví a subir… y ¡sorpresa!
El globo ya no estaba en sobre el Valle de Benasque… Había avanzado ya y estaba cerca del Aneto. Casi no lo disntiguía, pero sí, estaba allí…
¡Y mucho más alto que la cumbre más alta del Pirineo!
De ahí mi duda… si yo estaba en el Cogulla a 2.387 metros… y veía el Aneto enfrente… que está a 3.404 metros sobre el nivel del mar… ¡y el globo estaba mucho más alto! ¿A qué altura puede volar uno?
El pasado fin de semana, puente de la Constitución, fue mi primer fin de semana de entrenamientos en Cerler. Sólo estuve sábado y domingo porque el lunes tenía que trabajar pero, aún así, fue muy aprovechado.
La actividad del Club de Esquí Valle de Benasque comenzó a las nueve de la mañana en el llano de Ampríu. Allí se hicieron los grupos y conocimos a nuestro entrenador.
Ha nevado poquísimo en Cerler. Pero una vez más, el equipo de trabajadores de nieve, liderados por Gabi Mur, han hecho el milagro. Estaba abierto el Cogulla y la pista de Ampríu, eso sí, los trozos abiertos en perfectas condiciones. También los enlaces, la pista Barranco… Pero vamos, que para entrenar, con Cogulla y Ampríu tienes más que suficiente.
Cerler es una estación que siempre está inventando e innovando. En servicios, en restauración… Por algo han vuelto a ganar el premio a mejor estación de España en 2015.
Y es que en Cerler siempre pasan cosas…
Los huskyes ya están en otras estaciones… pero, ¿y esto?
¡Menudo máquina! Le vi por Cota 2000 y luego en la Colladeta bajando del Gallinero… Y luego bajando la pista de Ampríu… ¡Habrá que buscarle por el Endomondo a ver qué ruta ha hecho!
La tarde del domingo, en el Palacio de los Condes de Ribagorza, fue la fiesta de presentación del Club de Esquí Valle de Benasque. Con un auditorio lleno hasta la bandera y gente de pie o en las escaleras.
Primero se proyectó el vídeo “Un sentimiento, una ilusión”.
Con una puesta en escena cuidada, fueron saliendo uno a uno a todos los entrenadores y se presentaron todos los programas.
Mención a los patrocinadores principales…
Y tras el sorteo de material y regalos, concierto de la banda juvenil Replay. ¡Cómo tocan los chavales!
Muy buen fin de semana, muy buen ambiente y muchas ganas de continuar aprendiendo con esta gente.