Zarkana muy bien, pero muy lejos de Corteo
El pasado viernes estuve viendo Zarkana, el último espectáculo del Cirque du Soleil que visita Madrid.
La principal novedad de Zarkana es que es “una producción a gran escala”, como lo llaman ellos. ¿Qué quiere decir? Que no es la carpa habitual del Circo del Sol (Le Grand Chapiteau)
En la práctica, permite que la escenografía sea muy espectacular. Enorme, con unas pantallas gigantes que dan sensación de profundidad y grandiosidad. Muchos cambios de atrezzos… y un escenario realmente grande.
Por el lado contrario, la distancia del público al escenario es muchísimo mayor. Incluso las primerísimas filas de precios altísimos, están lejos… y muy abajo.
Es como ir a un concierto en un teatro o en un estadio…
Mi experiencia fue que la primera parte, hasta el descanso, me quedé muy frío. Me costó mucho entrar en el espectáculo… la distancia… y los números tampoco eran nada que no hubiéramos visto ya -los que hemos ido a todos los espectáculos anteriores que han visitado Madrid-.
Tras el descanso de veinte minutos, la cosa cambió y empezó lo bueno. Alguna novedad y las mejoras de lo ya conocido vinieron entonces. Ahí sí.
Con respecto al vestuario de los artistas, vuelven a ser en la línea del Circo del Sol de siempre. Seres raros, deformes, extraños…
La historia, cuesta seguirla. Trata de un mago que ha perdido la magia y su amor… el idioma parece italiano, aunque no entiendo nada de lo que cuentan. Me dicen que es un idioma inventado… puede ser, pero entonces las canciones me parecen largas. Pensaba que sería italiano y así, si lo dominas, seguro que disfrutas más.
Aun así, muy bien, ya digo. Muy recomendable para los que no conozcan el Circo del Sol, porque los números son muy espectaculares -si no los has visto antes-… o para los frikis como yo que disfrutamos con casi todo. La segunda parte está muy muy bien.
El precio, que es lo que siempre se dice, es caro. Pero realmente, cuando estás allí, ves la gente que trabaja en cada espectáculo, los medios que llevan y lo complicado que es todo, se entiende que no puede valer 10 euros.
Una de las cosas que me gustaron de esta “producción a gran escala” fue que los artistas no repetían número, así que al final, cuando saludan todos, salen en orden de actuación… así recuerdas todo lo que has visto y te haces una idea de la cantidad de gente que actúa.
Lo comparo con Corteo, no porque haya sido el espectáculo anterior, sino porque Corteo -para mí- fue perfecto. El mejor. En carpa, cercano. Con una historia que todo el mundo podía seguir porque mezclaba el francés, inglés, castellano… vestuario cercano, personajes entrañables… Se nota la mano del autor, Daniele Finzi.
En Zarkana, el público habla, comenta… porque estás lejos. En el Grand Chapiteau nadie abre la boca y alucina.
Por lo tanto, muy bien, espectacular… pero me quedo con los espectáculos más cercanos. Y si podéis ir a Corteo, no lo dudéis.