Cómo conseguí hacer deporte en casa
Cuando todo esto empezó no me las prometía muy felices… nunca he sido mucho de hacer deporte en casa. La bici estática me deprime… y ponerme a hacer tablas y ejercicios se me antojaba casi imposible…
Tengo amigos que se compraron un rodillo u otros artilugios fantásticos… quizá por ahí, por el lado de la novelería, me habrían podido enganchar… pero ni por esas…
Pero claro, el panorama pintaba muy negro… íbamos a estar muchas semanas encerrados en casa y había que ponerse las pilas…
Empecé con la bici estática… media horita… Alguna sesión de Bosu… pero no iba a ser suficiente.
Probé alguna app, como la de Adidas… pero no…
Y en eso que descubrí que la gente de Brooklyn Fitboxing estaban subiendo vídeos con clases a youtube. ¡Y ahí sí!
En diciembre me apunté al Brooklyn Fitboxing de Sanse… porque necesitaba hacer algo de ejercicio completo, de todo el cuerpo… algo que equilibrara la esgrima, el esquí, los patines…
Y así empecé a hacer los vídeos de Brooklyn Home Edition.
Descubrí a Bully, a Ricky, a Efthalia, a Fernando, a Tomi, a Marcella…
Y bueno, lo iba haciendo. No es lo mismo que en la sala, pero estaba muy bien. Un challenge duraba dos semanas y cada trainer hacía un par de vídeos a la semana, con lo que los entrenamientos eran distintos, no sólo por los funcionales, sino porque cada persona lo hace a su manera.
Me hacía gracia Bully con sus comentarios… de Ricky me gustaba cómo estiraba y cómo cuidaba mi cadera… de Efthalia me encantaba lo bien que explicaba, cómo me hacía sentir seguro, en cada ejercicio, corrigiéndome como si me estuviera viendo… con Fernando igual, me gustaba su sesión y encima me reía mucho con él y sus comentarios.
Así luego pude descubrir la cuenta de instagram de Fernando, donde hacía directos cada día… ¡Y ya era otra alternativa más!
¡Muchas gracias, Fer!
También he buscado los vídeos de Efthalia para el Ayuntamiento de Madrid y los he hecho. ¡Unas iniciativas fenomenales!
Gracias a todos… y especialmente a estos dos… he conseguido hacer deporte en casa.
Ahora toca intentar mantener el hábito adquirido y combinarlo con actividades fuera.